Los miembros de los tribunales también están preocupados
La administración y los sindicatos firmantes lo han hecho "tan
bien", que no se manchan las manos de sangre. Delegan en manos de unos “jueces
no profesionales” la ejecución del ERE del profesorado interino, planificado y
ratificado escrupulosamente en "el acuerdazo" de 29 de marzo de 2017 y, de cuya sentencia dependerá “la no contratación” de personal interino que lleva muchos años prestando servicios a
la administración.
Estos jueces, profesionales de la educación, han asumido su rol y la rutina de su actuación como miembros de un tribunal examinador. Pero
esta vez son conscientes de que los opositores se juegan algo más. Así lo
expresa una profesora, miembro de un tribunal, ante la situación no deseada que
se les viene encima. (Ver carta al director)
A su situación de sobrexplotación laboral, hay que sumar las militmetradas actuaciones en tiempos y formas impuestas por la administración, unidas al hecho de que se sienten observados en un
proceso judicializado que, deberá garantizar los principios de igualdad y
publicidad.
Todo está preparado para que se cumpla un objetivo, un ERE
encubierto y acordado entre administración y sindicatos. "La sentencia ha de ser dictada en un tiempo récord" para que, ni los jueces involuntarios, ni los opositores juzgados, tengan tiempo de reacción ante las consecuencias de este proceso selectivo.
El artículo que enlazamos a continuación, muestra la preocupación
que existe entre los examinadores, porque esta aceleración del proceso
administrativo, puede provocar que no se garanticen algunos derechos que emanan
de la ley de procedimiento administrativo.